En los billetes de 50 euros los dibujos que podemos encontrar nos recuerdan en un primer momento a los diseños que tienen los billetes de menor tamaño. Pero nada más lejos de la realidad, los billetes de 50 euros están inspirados en el Renacimiento.
En el Renacimiento, todo incluyendo al arquitectura echó la mirada atrás y se centraron en la época clásica (anterior al gótico). En está época definen la arquitectura como arte y por esto que mejor que fijarse en la forma de construir de la época donde la percepción visual y la belleza era la mayor fijación, la Grecia clásica. En el Renacimiento supieron aprovechar los conocimientos técnicos que ya tenían para aplicarlos a los diseños clásicos donde se potenciaba la arquitectura como otra forma de expresión artística.
Por ello si vemos la representación que hay en los billetes de 50 euros el pórtico que se ve, nos recuerda bastante al del billete de 5 euros pero es como la versión refinada. Las construcción sigue siendo con piedra pero ya está tallada con formas ornamentales, tiene un mayor nivel de detalle dentro de seguir unas líneas austeras, la construcción parece más ligera pero sin perder entidad y robustez. En términos generales se vuelven a las fachadas muy potentes con pequeñas ventanas y a nivel materiales se trabaja la piedra pero se comienza a explorar otros materiales y a mezclaros para conseguir decoraciones in situ con la propia construcción.
En este momento de la historia fue cuando se comenzó a valorar lo individual frente lo colectivo, el humanismo. En la construcción se produjo la profesionalización por decirlo de alguna forma. Hasta ahora la arquitectura era un concepto anónimo donde no destacaba ningún nombre sobre los demás que participaban en la obra. En el Renacimiento cobra vida el concepto de Arquitecto y se autodenominan artistas y comienzan a labrarse un status social firmando sus obras y teniendo sello personal en el diseño para que el resto de la población pueda identificar sus trabajos.
Ahora le damos la vuelta al billete y nos centramos en la parte trasera, donde está el puente. Al igual que ocurre con las ventanas este puente nos resulta especialmente familiar, ya lo hemos visto en otro billete, esta vez en el de 10 euros. Si ponemos dos billetes uno al lado de otro tendremos la sensación de estar ante el mismo puente pero viéndolo en dos versiones diferentes, una con más definición en los detalles y otra más tosca. Conceptualmente es lo mismo, arcos de medio punto con refuerzos en la base de los ojos para darle más resistencia ante la fuerza del agua. Y en general una construcción de mucha entidad muy pesada y muy resistente, toda realizada en piedra. Si entramos en los detalles en uno vemos como está formado por sillares de tamaños irregulares mientras que el otro está hecho con sillares perfectamente medidos y de idénticas proporciones. Me gustaría destacar como en la versión renacentista del puente está remarcada la clave del arco (la dovela que cierra el arco en su punto más alto) este símbolo es lo poco que denota que a nivel estructural está más avanzado este puente.
Recordar que los dibujos de los billetes no representan ninguna construcción real existente dentro de la zona Euro, puesto que esto podría desembocar en conflictos entre países y sus ciudadanos borrando así el sentimiento y simbolismo que tiene el concepto de moneda única europea.
Imagen Wikipedia
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